
Diseñar pavimentos para jardines, terrazas y espacios exteriores no es una tarea sencilla.
Las decisiones técnicas que determinan la durabilidad, la estabilidad y la seguridad de la intervención son tan importantes como la calidad de los materiales de acabado.
La creciente difusión de los pavimentos elevados de exterior sobre soportes regulables ha abierto nuevas posibilidades en términos de diseño y gestión de los espacios, pero también ha impuesto criterios más exigentes en materia de seguridad y precisión en la ejecución.
En un contexto en el que terrazas, cubiertas transitables y bordes de piscina se convierten en auténticos espacios habitables, la ingeniería del sistema de instalación adquiere un valor decisivo. Por ello, es necesario un enfoque sistémico capaz de garantizar continuidad mecánica, resistencia a los agentes atmosféricos, capacidad de drenaje y seguridad para los usuarios.
El diseño de jardines y espacios exteriores no puede reducirse únicamente a la elección estética del revestimiento. Una losa de gres porcelánico, un elemento de decking compuesto o una lama de madera natural representan solo la superficie visible de un sistema más complejo, en el que las prestaciones estructurales, la impermeabilización y la seguridad de uso deben guiar cada decisión. Un pavimento elevado de exterior bien diseñado logra combinar ligereza constructiva, capacidad de drenaje y confort, transformando cualquier espacio exterior en un entorno habitable y funcional.
Las terrazas transitables y las cubiertas planas comparten una misma criticidad: la necesidad de proteger la capa impermeabilizante frente a los esfuerzos mecánicos. Cada soporte, si no está correctamente diseñado, puede convertirse en un punto de concentración de cargas y generar microfisuras con el paso del tiempo. De ahí la importancia de soluciones capaces de distribuir las cargas, permitir microajustes y mantener la cámara técnica subyacente completamente registrable. Solo así es posible conciliar libertad arquitectónica y mantenimiento simplificado.
El mercado actual demanda superficies exteriores cada vez más personalizables: bordes de piscina con losas de gran formato, terrazas urbanas con mobiliario integrado, espacios modulares para el sector hospitality y zonas peatonales con superficies multifinish.
La versatilidad de diseño se convierte, por tanto, en un factor competitivo. El proyectista debe poder contar con sistemas que admitan distintos formatos, garanticen la compatibilidad con diferentes soportes regulables y aseguren prestaciones constantes a lo largo del tiempo. En este ámbito, la innovación es la clave para transformar cada idea en un resultado concreto y duradero.
Todo proyecto de pavimento elevado de exterior se basa en la interacción de tres elementos clave: la superficie subyacente, el sistema de soportes regulables y la superficie de tránsito. La elección de soportes de altas prestaciones no es un aspecto secundario, sino el eje estructural de la estabilidad global. La posibilidad de regular alturas, compensar pendientes y distribuir uniformemente las cargas permite que la superficie de acabado exprese plenamente su potencial estético sin compromisos funcionales.
Paralelamente, la correcta protección de la capa impermeabilizante sigue siendo un requisito imprescindible. Vibraciones, infiltraciones y cargas concentradas pueden comprometer la durabilidad de terrazas y cubiertas, con daños significativos a medio y largo plazo. Los pavimentos elevados ofrecen una ventaja clara en este sentido, ya que permiten inspeccionar la superficie inferior sin necesidad de demolición.
Uno de los aspectos más delicados afecta a los bordes y perímetros de los pavimentos elevados de exterior, tradicionalmente considerados puntos críticos de la instalación.
Border Shield de Impertek ofrece una respuesta técnica específica a esta problemática. Se trata de un elemento modular que, gracias a su encaje en cola de milano, garantiza una instalación rápida y completamente registrable, sin necesidad de fijaciones mecánicas invasivas. La presencia de un apoyo estabilizador integrado, co-moldeado, desmontable y regulable, elimina el riesgo de vuelco de las losas. Además, el rebaje lateral previsto para la inserción de perfiles de cierre permite obtener acabados técnicos y estéticos limpios, especialmente adecuados para bordes de piscina y terrazas con barandillas vistas.
Desde el punto de vista del diseño, Border Shield permite tratar los perímetros como una parte integrante del sistema y no como zonas “débiles” resueltas con soluciones improvisadas. Esto reduce el riesgo de errores en obra y refuerza la percepción de seguridad para el usuario final.
La evolución de los pavimentos elevados de exterior no puede desvincularse del tema de la seguridad frente al viento y los impactos accidentales. La creciente presencia de terrazas equipadas en entornos urbanos o costeros expone los revestimientos a solicitaciones dinámicas que requieren sistemas de anclaje específicos.
GravitySystem de Impertek introduce un concepto innovador: una rejilla modular (GravityGrid) que trabaja en sinergia con soportes regulables para bloquear las losas en su posición, manteniendo al mismo tiempo la inspeccionabilidad de la cámara técnica inferior. El elemento distintivo del sistema es la combinación entre la estabilidad de la rejilla y la fuerza de anclaje proporcionada por accesorios como GravityLock y GravityCross, que garantizan la fijación mecánica de las losas incluso en condiciones de viento fuerte.
Desde el punto de vista técnico, el sistema preserva la continuidad de la superficie de tránsito incluso en caso de rotura de una losa, evitando hundimientos localizados y riesgos para la seguridad. Este enfoque eleva el nivel prestacional de todo el sistema de instalación y permite el uso de pavimentos elevados de exterior también en contextos anteriormente considerados críticos.

Todo proyectista sabe que los detalles constructivos determinan la calidad percibida de una obra. Las contrahuellas y los escalones en los pavimentos elevados de exterior son puntos sensibles, a menudo resueltos con soluciones artesanales que no garantizan la precisión necesaria.
El sistema EdgePlate ha sido desarrollado específicamente para resolver esta problemática. Está compuesto por placas conformadas que, fijadas a las cabezas y a las bases de los soportes, crean una superficie de anclaje estable para las contrahuellas. Los orificios superiores y los peines laterales guían la distribución del adhesivo, garantizando un encolado uniforme y duradero. En configuraciones de baja altura, es suficiente utilizar únicamente la placa superior, simplificando la instalación sin comprometer la estabilidad.
Esta solución permite diseñar bordes y escalones con el mismo nivel de seguridad y precisión que el resto del pavimento, eliminando puntos débiles que con frecuencia generan problemas estéticos y de instalación.
Hacia un diseño integrado y seguro
La introducción de sistemas como Border Shield, GravitySystem y EdgePlate representa una evolución significativa en el sector de los pavimentos elevados de exterior.
Para arquitectos, ingenieros y empresas constructoras, esto supone poder abordar con mayor seguridad la complejidad de terrazas y espacios exteriores, sabiendo que cada detalle constructivo dispone de una solución específica. En un mercado que exige estándares cada vez más elevados y espacios exteriores de alta calidad, estos sistemas constituyen no solo un valor técnico, sino también una ventaja competitiva.
La regla fundamental sigue siendo la misma: diseñar pensando en todo el ciclo de vida de la obra. Un pavimento elevado de exterior no debe limitarse a parecer estable y funcional en los primeros meses, sino mantener sus prestaciones a lo largo del tiempo, resistiendo las solicitaciones climáticas y el uso cotidiano. En este escenario, confiar en sistemas diseñados y probados mediante ingeniería es la única garantía real de seguridad y durabilidad.